Esta ley surge como una herramienta clave para fomentar entornos laborales más justos y responsables, dando la oportunidad a las empresas para implementar mecanismos efectivos para gestionar posibles irregularidades o malas prácticas.
Se trata de garantizar la transparencia y la ética en el ámbito empresarial. Es una normativa, alineada con la Directiva Europea 2019/1937 sobre la protección de los denunciantes, que obliga a las empresas a establecer canales internos para gestionar denuncias relacionadas con infracciones legales, incumplimientos éticos o cualquier comportamiento indebido dentro de la propia empresa.
Esta ley aplica a cualquier empresa del sector privado y público con 50 o más personas trabajadoras. También es de aplicación para las instituciones públicas, incluidas entidades locales con más de 10.000 habitantes.
La implantación de un canal de denuncias no solo ayuda a cumplir con la legislación, sino que también aporta ventajas significativas a las empresas. Establece un sistema efectivo de mejora la percepción de la empresa y además también ayuda a prevenir riesgos legales y financieros, a la vez que promueve un entorno laboral donde se valoran los principios éticos y se cumple con la legislación vigente.
En definitiva se trata de fomentar la transparencia dentro de las empresas incentivando las denuncias de irregularidades con un método seguro y responsable para el denunciante.
La Ley del Canal de Denuncias es una gran oportunidad para que las empresas refuercen su compromiso con la ética y la transparencia. Al implantar un sistema efectivo, las empresas no solo protegen a las personas que denuncian, sino que también refuerzan su cultura corporativa, minimizando riesgos y consolidando su reputación.
Nosotr@s te podemos ayudar a implantar esta normativa en tu organización puesto que ya tenemos experiencia en diferentes organizaciones en las que ya hemos implantado su propio sistema cumplimento con todos los requisitos de la norma.